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jueves, 13 de noviembre de 2008

Historias del Trullo


Mucho dará que hablar la cárcel de última generación y alta seguridad de Albocasser.
De momento, mientras las circunstancias nos lo permitan, nos lo tomaremos a cachondeo.

Cámaras de seguridad robadas, fontaneros y electricistas trabajando mientras los reclusos miran, autobuses blindados cargados de presos parados en el centro del pueblo preguntando por donde se va a la cárcel...

El pasado fin de semana, en Picassent, un preso agredía a un funcionario porque no quería ser trasladado a la prisión de Albocasser. La pregunta de mucha gente era porque el recluso se negaba tajantemente a ir hasta Castellón II si en lugar de una cárcel parece un hotel de 5 estrellas con todas las comodidades imaginables y más.  Después de conocer la última denuncia de los sindicatos de funcionarios penitenciarios, pues lo "entiendes" (La negativa, no la agresión)

Un centro penitenciario donde no funcionan los teléfonos, no funciona la cocina, no hay servicio de limpieza, no están en marcha los talleres y la escuela. Lo único que pueden hacer los reclusos es estar "tirados" en el patio o como mucho, observar como electricistas, fontaneros y demás trabajadores externos, trabajan -medio acobardados, seguro- a toda marcha por terminar unas obras inauguradas y funcionando sin estar terminadas.

Si se producen incidentes (que según el comunidado de los sindicatos, se lee entre líneas que los ha habido) no hay un modulo de aislamiento funcionando. Mare quina por.

El otro trabajo que tienen es buscar mantas a la desesperada. No funciona la calefacción (tampoco es tan grave esto porque frio, lo que se dice frio, en Albocasser como que no) y el agua caliente no saben lo que es. Duchita fria los más aseaditos. Seguro que en Castellón II los presos en lugar de ponerse en huelga de hambre se declaran en huelga de ducha.

El teléfono del ayuntamiento de Albocasser sigue sonando mil y una vez al día y la pregunta no cambia "Por favor, sería usted tan amable de facilitarme el teléfono de la cárcel? es que tengo allí a un familiar con el que necesito hablar urgentemente" La respuesta sigue sin cambiar "lo siento, no sabemos que número debe usted marcar".

La imagen idílica del primer día, cuando la cárcel no tenía reclusos, va desmoronandose día a día. Va en continuo aumento la cantinela burlona de propios y extraños cuando se dan a conocer las historias diarias del trullo. Mientras tanto, la dirección general de instituciones penitenciarias, ni afirma ni desmiente. Se llama Andana.

Hace falta un incidente grave o una fuga para que alguien diga esta boca es mia y se reconozca que las prisas no son buenas consejeras?

salut.