jueves, 19 de febrero de 2009

Carta a mi Padre


Querido Papá

Hace ya unos cuantos días, que en silencio, nos dijiste adios. Te fuiste, a tu manera, con tu sonrisa seria. Embarcaste en un viaje del que se que no volverás. Pero para mi nunca te fuiste.
Se que estás cerca de mi. Lo siento cada vez que necesito un abrazo, una palabra de ánimo, un "saldremos de esta".

Han pasado algunas cosas desde tu adios. El pequeño Carlos, el varoncito de la familia, se ha hecho "mayor". Cuatro añitos. Sigo recordando, cada 17 de febrero, de madrugada, esa cara que se te puso cuando viste por primera vez a tu único nieto varón. Claro! esos ojos imponían...tan pequeño, tan frágil...y con tantas ganas de comerse el mundo. 
Decía Carlos ayer, que se va a ir a una montaña muy alta, hasta que vayamos a Peñagolosa., para gritar muy fuerte "weloooooooooooooo ya soy mayor"...y lo es, a su manera entiende tu adiós.

El día aquel que te dijimos adiós para siempre, fue mucha la gente que se quiso sumar a nosotros, en tu ultimo viaje. Sé, que desde tu nuevo "hogar" lo habrás visto e incluso tu, te habrás sorprendido.

También imagino que sabrás que te dedicaron dos programas de radio. Uno, ese que te hacía reir tanto por las noches, que me enseñaste su existencia cuando no podía dormir (que paradojico, primero yo, después tu). Supogo que tu lo escuchaste antes que yo pero apuesto a que te reiste muchisimo!!. Si es que al final, como siempre, tenías razón, Arturo, es Arturo (gracias guapo!!)

Este lunes volví yo al trabajo. Lo siento, pero en cuanto me puse al microfono se me escaparon las lagrimas. Pero iba por ti, como siempre. Aunque he de reconocer que cuando mis ojos se llenaron de lagrimas, esperaba que llegara una llamada tuya diciendome que estabas en "mi zona" con "tu unidad" cuidando de nuestras montañas.

Seguiré esperando esa llamada, esa señal, que me confirme que estás aquí, aunque yo se que lo estás.

Peñagolosa...Sabes? está más alta estos días. Mi hermana y yo creemos que es porque hace puntillas para estar un poco más cerca de ti. Siempre he tenido celos de Peñagolosa...lugar magico, eh? El otro día hable con Pedro. Sigue guardando esos arboles que teníamos pendiente ir a plantar a Sant Miquel, para reforestar la zona quemada. Pero ha decidido cambiar el tuyo. Será un pino, está precioso. Lo plantaremos allá donde "els Pelegrins" hacen un alto. Allí donde los participantes de la marato i mitja, toman un respiro. Tienes que estar atento, que pararan y te dirán eso de "Vicent, Bon día...que bonica tenim la muntaya avuí". Ya me lo contarás.

Luego iremos a Peñagolosa, para que el grito de Carlos lo oigas bien. Y de allí, ya sabes donde hay que parar, verdad? no me gusta el carajillo, pero esta vez, cuando vayamos a reponer fuerzas al Alforí, te prometo que me tomaré uno a tu salud, por ti.

Creo que te he contado "casi" todo lo que quería contarte. La otra historia que teníamos a medias cuando te fuiste, me la guardo para esta noche, para cuando me vaya a intentar dormir. Tú ya sabes de que va y yo, seguiré esperando que me digas que debo hacer.

Te quiero papá.

miércoles, 11 de febrero de 2009

Papa

El...con él aprendí todo lo que se. Era, y no es un tópico, el padre más maravilloso del mundo. Con sus manías, sus bromas a veces un poco bestias...pero era EL.

Siempre con una palabra amable para todo el mundo. Siempre más cerca del débil que del fuerte. Siempre con su caracteristica sonrisa seria en la boca.

Solo mirandote a los ojos él sabía si estabas contento o triste. No había manera de engañarle.

Adoraba la montaña. Allá donde iba, le querían. 

Lo hemos podido ver estos días, mientras estabamos en el hospital, que era más la gente joven que "mayor" la que venía a verlo y a decirle "Vicent, que el Peñagolosa ens està esperant".

Como he dicho antes, adoraba la montaña. Pero sobretodo, Peñagolos "el tejo" y la serra d´Irta...el Desert...la pujada al Bartolo...la cursa de Borriol, la de Benassal, la Vilavella, Vilafamés, la Marato i Mitja...y tantas otras que no me caben, pero si le decías a él "Papa, quina es la que més t´agrada?" el no elegía ninguna...todas le gustaban por una cosa o por otra, pero sobretodo, por la gente, las personas, que en el camino se encontraba.

Desde donde esté...seguirá haciendo sus marchas, seguro...si no hay montañas, como constructor que fue, las "construirá". Verá sus partidos de fútbol, seguro que ya ha encontrado compañeros de tertulias con los que comentar "la vida"...

Papa...allà on estigues...gracies per tot el que ens has donat durant tots aquestos anys...gracies per ensenyarme tot el que se...gracies per soportar a la teua filla maniatica. Només Gracies per tot. Te vullc.

Marian.